domingo, 12 de octubre de 2014

Fuiste tú

-Apareciste en el crepúsculo, caminante, vacilante sobre las aguas, en tu lento avanzar, pasaron las estaciones arrasando con los miedos acompañando mi frío invierno, el sabor de un café, el periódico en la cama, las ventanas empañadas, mi camisa, tu sonrisa dibujada alegre, diáfana, distante no en mi alma, allí donde el tiempo se encuentra así mismo nos encontramos sumergiéndonos en su comienzo incitando al sueño su letargo despertar…

-Me envolviste en tus perennes caricias convirtiéndote en mi adicción, en el juego de seducción fuimos uno, nuestras imágenes se dibujaban por los aires danzantes,- ¿sabes porque? -¡Porque siempre ha sido así…! Perpetuamos nuestra eternidad desde mucho antes, cuando nuestros silencios nadaban cruzando barreras, lanzando piedras a la inmensidad de la nada, socavando de la profundidad de nuestros vacíos tu nombre y el mío…

-Estas presente en mí, desde esa mirada cuando mis párpados abrieron sabiendo que debían esperar, el nacimiento del amor no era lejano, lo pudieron sentir mis pupilas, conociendo desde el ayer como serias…


-Prolongamos nuestra historia más allá de la vida y la muerte, nuestras fragancias se fundieron en formas sobrenaturales acercando los pensamientos, residiendo los espíritus, tornándose en victorias sobre todo estado físico, con sus sutiles pétalos el amor construyo su nido al abrigo de nuestros corazones…

2 comentarios:

  1. Amelia, me ha encantado ésta prosa poética, tiene mucha calidad literaria.

    Mis felicitaciones.

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  2. Muchas gracias Pastora, por tu lindo comentario, saludos

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